El ahorro: una manera de asegurar el futuro

Todos, sin importar nuestra clase económica o nivel social tenemos metas, proyectos y sueños, para los cuales necesitamos tener una cierta solvencia económica y financiera para poder verlos cristalizados, ya sea en un corto o largo plazo, dependiendo del alcance o la magnitud de los mismos. Por lo tanto, el que se puedan llevar a cabo o no en su mayoría va a depender de la manera en como utilizamos los recursos que poseemos, o si hemos cultivado el hábito del ahorro como una forma de asegurar el futuro económico propio y de la familia futura.

Si bien el alto costo de la vida y la necesidad de cubrir todo lo necesario para disfrutar de un cierto grado de bienestar hacen cada vez más difícil el poder destinar una parte de tus ingresos al ahorro, si sabes en que gastas tu dinero cada día, puedes hacer un estudio objetivo de cuales gastos no son necesarios y podrían ser destinados al ahorro. Quizás puedas pensar que sería muy poco dinero, pero si lo haces como un hábito periódico de todos los días veras que con constancia será un apoyo para tener ahorros para el mañana.

Si estás pendiente de tus finanzas, llevas un control de gastos y presupuestas como vas a invertir tus ingresos mensuales. Puedes tener una estabilidad económica para el mañana. Tomando en cuenta que es necesario crear un fondo de emergencia, destinado para atender casos especiales, ocasionales o fortuitos, para que no tengas que destinar tus ahorros para atender esas necesidades de última hora, sino poder suplirla con el dinero que tengas destinado para ese tipo de contingencia.

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Para poder tener un ahorro significativo en el tiempo lo ideal es poder guardar al menos un 10% de lo que se genera durante el mes en todas las actividades que te ofrecen un beneficio económico. Logrando este porcentaje de ahorro puedes conseguir dinero que te puede servir entre otras cosas: para realizar un viaje, comprar un bien de tu interés o de interés familiar, pagar un curso o algún estudio de importancia para alguien de la familia, en fin, será un dinero que poco a poco se va incrementando para un beneficio futuro.

La tarea más difícil es dar el primer paso para comenzar el ahorro y seleccionar qué gastos no esenciales puedes evitar o reducir para dedicarlo al ahorro, una manera de hacerlo más atractivo es enfocarte en una meta para lo cual destines el ahorro, que puede ser por ejemplo un viaje familiar, los estudios personales o de un hijo, o comprar un bien que te ayude a tener una mejor calidad de vida, en fin, algo que te motive a mantener el hábito del ahorro.

Si tienes metas claras de lo que quieres lograr con tus ahorros y cuánto específicamente necesitas, será mucho más fácil saber tus necesidades reales para tener la posibilidad de disfrutar en el futuro, de algún beneficio gracias a tu planificación, organización y presupuesto de tus ingresos de una manera efectiva a tu favor.


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