Vender no es fácil. En una empresa o negocio, la principal interacción siempre será con los clientes, siendo importante mantener una buena relación ellos. Encontrarás consumidores que se caractericen por ser amigables, indecisos y racionales, sin embargo, habrá otros clientes que sean críticos, exigentes o complicados. Sea cual sea la personalidad que presenten recuerda que ofrecer una buena experiencia de compra influirá en el posicionamiento de tu marca basada en la atención que has brindado.

El emprendedor sabe que no todos los clientes son iguales, por ello, compartimos una serie de estrategias para manejar una situación difícil de manera asertiva:

• Escucha y mantén la calma: Las buenas habilidades de escucha permiten que los clientes se sientan comprendidos y expresen sus preocupaciones. Asimismo, mantener la calma te facilitará encontrar soluciones y alternativas a los reclamos de los clientes.

• Cuida el lenguaje no verbal:  El lenguaje corporal permite entender a otros más allá de un idioma. Debes asegurarte que tanto tu expresión, como el tono de voz sean adecuados y sinceros, con ello se generará una imagen positiva con los consumidores. Reaccionar impulsivamente, ante una persona difícil o molesta, únicamente generará más reacción negativa por parte del otro.

• Cumple los acuerdos: Si vas a brindar una solución o promesa debe ser realista y clara. Los clientes deben saber que deseas satisfacer sus necesidades a largo plazo y que estás dispuesto a realizar un seguimiento hasta que eso suceda.

• Prueba otros canales de comunicación: La implementación de un canal virtual para recibir los comentarios o quejas, permitirá a los clientes saber que son importantes para la empresa o negocio y fortalecerá el lazo de comunicación.

• Capacita a tu equipo en atención al cliente:  La capacitación al personal de una empresa o negocio es una inversión que te permite mejorar la calidad del servicio y la atención que se brinde al cliente.

Existen varias razones por las cuales un cliente puede ser difícil, pero, lo importante es saber cómo afrontarlos con éxito.

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La inversión en joyas de oro se ha convertido en un ejercicio rentable para salvaguardar tu capital en el transcurso del tiempo. Unas cadenas, anillos, aretes o pulseras son objetos muy valorados debido a que no se devalúan fácilmente y te sacan de apuros en épocas de incertidumbre.

Muchas personas, entre ellas, emprendedores, emplean joyas de oro como alternativa de financiamiento para iniciar un negocio o solventar necesidades a corto plazo. Aquí, te contamos más motivos para tener prendas de oro en tu patrimonio:

• Valor universal: El oro es cotizado y aceptado en cualquier parte del mundo, por ello, puede convertirse de manera rápida en liquidez de dinero. Esto se debe a que es un recurso limitado y la escasez refuerza su valor inherente.

• No se devalúa fácilmente: A diferencia de los billetes, el oro tiende a mantener su valor. Asimismo, no cambia con el tiempo, ya que ningún gobierno lo puede duplicar y tampoco imprimir.

• Ganancia en la compra – venta: Cuando una crisis se presenta, el oro comienza a ganar valor, entonces puedes obtener ganancias por la venta del metal cuando esté a punto de llegar a precio máximo.

• Te protege contra la inflación: El precio del oro reacciona con fuerza ante entornos inflacionistas. Por lo tanto, lo convierte en rentable.

• Garantía de Préstamos: Este metal puede emplearse como garantía de préstamos. Caja Sullana cuenta con el crédito prendario, que consiste en otorgar al cliente un préstamo de dinero acorde a las joyas de oro que deje en garantía, ayudándolos en la solución de sus necesidades de efectivo.

Existen diversas alternativas para conservar un respaldo económico, una de ellas es tener prendas de oro, que serán tu refugio universal en épocas de incertidumbre y te permitirán alcanzar tus metas y objetivos.

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Un emprendedor siempre debe estar preparado para cualquier suceso inesperado que se presente como un incendio, robo o desastre natural, por ello, es de vital importancia la adopción de medidas adecuadas para disminuir la cantidad de pérdidas que dejen estos impactos.

Prevenir es una tarea prácticamente obligatoria para que una empresa resista un riesgo interno o externo que afecta el correcto desarrollo de sus actividades. A continuación, te compartimos una serie de medidas que debes tomar en cuenta para la seguridad de tu negocio frente a una emergencia:

• Elabora y sigue un plan de emergencia:

El personal que labore en tu empresa o negocio debe conocer tu plan de emergencia en caso ocurra un siniestro, asimismo, el lugar de trabajo debe contar con un botiquín, extintores y mochila de emergencia. Designa como “encargados de seguridad” a ciertos miembros del personal para que guíen y ayuden ante un desastre.

• Almacena información en formato digital:

Un emprendedor no solo debe almacenar información de su negocio en formato físico, sino, es muy importante resguardarla en formato digital como “La Nube” o la “Intranet” de la empresa. De esta manera, la lista clave de facturas/boletas, inventario, proveedores, acreedores, clientes y empleados seguirán a tu alcance, evitando pérdidas significativas.

• Ten una caja de seguridad:

Una caja fuerte de alta resistencia te permitirá proteger tu dinero, escrituras y objetos de valor frente a siniestros como terremotos, incendios, inundaciones entre otros.

• Adquiere un seguro:

Afiliar tu negocio a un seguro te permitirá resistir a un evento inesperado. Caja Sullana ofrece el seguro Multirriesgo Pyme que brinda protección ante la ocurrencia de un imprevisto asegurando mercadería, bienes y equipos en general que los clientes declaran poseer. Este aplica como seguro vinculado para todos los créditos empresariales.

Recuerda, un emprendedor no puede predecir sucesos inesperados, pero sí puede prepararse para minimizar daños y evitar la interrupción en tus actividades.

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